Y sin embargo,
a veces no sé qué hacer;
me siento afligid@ e impotente,
ante las situaciones difíciles,
que debo enfrentar de alguna manera.
Una vez más,
me siento en medio de ese tan trillado:
- ¿Qué hago... qué hago?
Me has dado una consciencia,
para darme cuenta de las cosas.
Me has dado la experiencia
de mis errores pasados.
Me has dado el amor y el apoyo
de los que me aman.
Me has dado el tiempo,
para no precipitarme en el ya o ya.
Me has dado espejos de lo que me pasa,
en las personas que me rodean,
y que ahora sufren,
por las consecuencias
de sus actos sin medida.
Me has dado ayudas
y herramientas que pocos tienen.
Me has dado comprensión,
conocimiento y amor.
Y sin embargo...
me siento perdid@ y sin saber qué hacer.
Padre, vengo a ti en busca de ayuda;
dispuest@ a hacer el 100%
de lo que está en mis manos,
y a dejar en tus manos,
lo que yo no puedo hacer.
