Los tiempos difíciles

Nos permiten darnos cuenta
de lo afortunados que somos,
porque todo podría haber sido peor,
si no fuera por la presencia constante
de Dios en nuestras vidas;
junto con las personas,
que nos acompañan, apoyan y sirven,
simplemente porque nos aman.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *