Los malos entendidos
que tantas tristezas
y molestias nos causan,
no son más que el fruto
de una mala comunicación.
Muchas veces asumimos,
que los demás saben
lo que nosotros sabemos,
y no damos las explicaciones del caso.
Cuando es tan sencillo y práctico,
saber decir las cosas
y brindar una información completa,
con el fin de comunicarnos mejor.