Descubriré la belleza que hay en mí

Me observaré con amor,
sin mirar las arruguitas, el barrito,
la mancha... o la cicatriz;
sin detenerme en mi peso,
en mi estatura o en esa canita de más
que marca el paso del tiempo.
Me observaré sin crítica,
agradeciendo a Dios por la perfección,
oculta tras mis rasgos personales;
ya que al ser creación de Dios,
mi imperfección es perfecta.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *