¿Me cuesta ser medido?

Para poder ser medido en todo,
empezaré siendo medido en la comida.
Comeré menos y con mayor frecuencia:
si antes comía grandes porciones
3 veces al día, ahora comeré 5 o 6 veces,
reduciendo sustancialmente la cantidad,
y observando su calidad y balance.
Beberé suficientes líquidos,
de ser posible, un vaso antes de cada comida,
esto ayudará a mi digestión y a mi salud.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *