Porque es un mal muy contagioso
y de moda en el mundo actual.
Síntomas: ausencia, indiferencia,
pereza, dejadez, desinterés,
egoísmo y comodismo,
ante el sufrimiento ajeno.
Como lo dice la palabra in-dolencia:
al no existir dolencia,
se desconoce el dolor
y es difícil comprender a otros,
a través de la compasión;
ya que nada nos conmueve.