Me enfocaré en el origen
de lo que me pasa,
y no en sus consecuencias

Cuando suceden cosas desafortunadas,
me dedico a arreglarlas,
sin pensar en lo que las causó...
no se trata de mandar a arreglar el carro,
cada vez que bebo y lo estrello;
se trata de comprender,
que tengo un problema de alcoholismo
y que es necesario tratarlo.
Lo mismo sucede con una enfermedad,
o con cualquier cosa que me pase;
hay que profundizar en su origen,
y no sólo en sus consecuencias.

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