Así como nos llenamos de cosas inútiles,
en ocasiones conservamos relaciones…
que no aportan nada y que no son satisfactorias.
El desapego consiste,
en ser conscientes del equipaje que cargamos,
y en ir liberándolo gradualmente en el camino.
Revisa esas relaciones que te afectan,
que no son recíprocas ni correspondidas,
que no son equilibradas y te desgastan;
y poco a poco,
sin pelear y sin cortar radicalmente,
ve dilatándolas en el tiempo.
Como el fuego, al no ser alimentadas,
se irán extinguiendo.